domingo, 28 de octubre de 2007

Un partido de los que crean afición


En la segunda jornada, el equipo Benjamín A se desplazó hasta Monforte para jugar contra el Calasancio A. La mañana no empezó bien para los pontinos, ya que se encontraron con unas bajas temperaturas y una niebla muy espesa, además; para mejorar la situación, el colegiado no se había presentado. Tras casi una hora de retraso el partido dio comienzo y con un espectador de árbitro; al que se le notaron demasiado los colores y que vale más no mencionar.
Los equipos estaban ansiosos por jugar debido al retraso y la única baja que presentaba el Ponte, era la de su guardameta Kevin; que bajó al Benjamín B para asegurar la victoria de los nuestros contra el Allariz (Kevin a la postre resultó clave en el triunfo 2-6, con unas magníficas actuaciones); mientras, el Calasancio tenía una novedad, su central Sergio (que realizó un gran partido).
La primera parte comenzó con los dos equipos muy centrados y con muchas ganas de dominar el partido desde el inicio, pero fue el Ponte el que consiguió hacerse con el control del juego. El partido era vibrante y con el 0-0 en el marcador todo era una incógnita. Los escolapios intentaban una y otra vez salir a la contra, pero la defensa de Manuel e Iván era insuperable. Con la entrada de Sergio en el campo a los 10 minutos, el Ponte aumentó aún más su dominio y llegarón dos ocasiones clarísimas de gol con Jack y Javi como protagonistas, pero el Calasancio parecía tener cuatro porteros porque sacaron hasta 4 rechaces debajo de los palos en ambas ocasiones. La pelota no quería entrar y la grada temía que los locales llegasen una vez y marcasen, pero en la única ocasión que tuvieron; una falta alejada del área y escorada a la izquierda, apareció la figura del cancerbero; Adrián, que detuvo el trallazo de Asier en dos tiempos.
Con el marcador a cero y con un claro dominio visitante, terminó la primera mitad.
La segunda parte arrancó con más energía y emoción y Pablo de saque directo estrelló el balón en el larguero, dos minutos más tarde en una jugada personal Pablo desbordó a los centrales y se plantó mano a mano con el portero, pero Ramón consiguió rozar lo justo el balón para que se fuese lamiendo el palo.
Parecía un día de esos en los que da igual lo que hagas, la pelota no quiere entrar y ya está, pero en ese momento (min. 6), una recuperación sumada con otra gran acción personal de Pablo hizo que este se volviese a enfrentar a Ramón y parecía que la jugada tendría el mismo final que la anterior, pero fue en ese instante en el que apareció un destello de esperanza, Fabio llegando por el 2º palo conseguía meter ese gol maldito y demostraba una vez más que tiene ese instinto asesino de todo depredador en el área.
Con el 0-1, el equipo cogió alas y aumentó la presión, pero el Calasancio no se arrugó y volvió a plantar cara; sin embargo, serían otra vez los pontinos los que volverían a dar el golpe, en la única falta señalada a favor de los visitantes. Alberto que había sufrido la infración al lado del pico derecho del área, no estaba dispuesto a dejar que nadie le quitase ese lanzamiento y con una sangre fría impropia de estas edades, cogió dos pasos de carrerilla y clavó el balón en la mismísima cruceta (un golazo que dejó de piedra al portero local).
Con el 0-2 el partido ya estaba encarrilado, pero fue en ese momento donde el "colegiado" intentó dar alas a los locales y cuando Adrián (mediocentro del Calasancio) consiguió meterse en el área, señaló penalti (min. 17) por una acción que ni Braian (jugador que defendía a Adrián) llegaba a comprender; ya que en medio de la disputa por el esférico, Adrián consiguió dar un pase al punto de penalti que fue recogido por Sergio (nuetro mediocentro). Esa decisión provocó la ira de la grada, que ya estaba encendida por otras acciones y en medio de todo el jaleo, Asier lanzó el penalti; Adrián adivinó el lado y la altura, pero el balón salió fuera. La jugada no acabó ahí y con el saque en largo de puerta por parte de Adrián, conseguimos burlar el medio campo de los locales y fue entonces cuando aparecieron dos diablillos; Jack y David, que con una rápida pared consiguieron que David se quedase solo contra el portero y anotase el tercero para los visitantes.
Con el 0-3 los monfortinos no se rindieron e intentaron marcar ese gol que les volviese a meter en el partido, pero la defensa del Ponte se muestra intratable e insuperable en este inicio de campeonato y no permitió a los locales efectuar ningún disparo entre los tres palos. En los instantes finales, otra buena acción de todo el equipo del Ponte, consiguió dejar solo otra vez a Pablo delante de Ramón y a la tercera fue la vencida, un tiro seco y duro puso el 0-4 definitivo en el marcador.
Al final, una nueva victoria y un gran partido de ambos equipos, que demostraron toda la emoción y tensión que se vive en un gran partido y que dejaron a todos los aficionados más que satisfechos por la entrega derrochada.
Los goleadores fueron: Fabio, Alberto, David y Pablo; y la única asistencia del partido fue de Pablo.